domingo, 12 de febrero de 2023

Las antiguas "Aldabas" de la Ciudad de las Tres Culturas (Toledo) - Leyenda Templaria (Los tres golpes)

Sin duda alguna... Toledo tiene un "encanto" único...
 
Pasear por su casco antiguo... es regresar en el tiempo al medievo...
 
No te mueras sin conocer Toledo...
 
 
Aldaba
 
Pieza de metal, especialmente de hierro o de bronce, que se sujeta en la parte exterior de la puerta por una base articulada y con la que se golpea para llamar.
 
"llamaron a la aldaba de la puerta principal del castillo"
 
 
Puertas con Aldabas
(Calles en Toledo)
 

 
Otra definición
 
Una aldaba, picaporte o llamador es una pieza articulada de metal situada en las puertas exteriores de las casas que sirve para llamar a sus ocupantes por medio de golpes en la puerta.
 



Aldabas
 
 
Las primeras aldabas en la Edad Media consistían en "martillitos" suspendidos de las hojas de las puertas por la parte exterior. 
 
La forma más típica y más antigua es la de argolla o aro, de hierro en las más antiguas, generalmente unida a una cabeza de bronce. 
 
Se golpeaba con ellas sobre una cabeza de clavo bastante gorda. Estas aldabas servían además como tiradores y en las puertas de algunas iglesias eran un signo de asilo que se requería asiéndose de dicha anilla.
 



 
La forma de martillo se usó más en las casas particulares. Los más antiguos eran sencillísimos y estaban adornados con grabados a buril. 
 
Del siglo XV, existen muchos ejemplares de hierro forjado entre los cuales los hay preciosos, delicadamente forjados y cincelados, y con escudo heráldico pintado de los colores correspondientes.
 
Con el paso del tiempo estas aldabas cayeron algo en desuso y sólo se conservaron para las puertas de las habitaciones rurales.
 

 
Mucho más antiguo, del siglo XI, es el aldabón de la puerta árabe del castillo de Daroca que hoy se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de España, el cual consiste en una simple argolla pendiente del vértice de un cono todo de hierro.
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Aldaba
 


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Leyenda Templaria en Toledo (Los tres golpes)
 
Cuenta una leyenda... que en el año 1307 de nuestro señor... cuatro caballeros templarios huídos de Francia... llegaron a tierras toledanas...
 
 
Sólo pedían cobijo, lumbre para calentarse y algo de comida... llevaban cabalgando muchas jornadas, quizás tan duras como en "Las Cruzadas", que años atrás protagonizaron sus hermanos de La Orden de los Pobres Compañeros de Cristo del Templo de Salomón....
 
(Militarmente, sus miembros se encontraban entre las unidades mejor entrenadas que participaron en "Las Cruzadas"
 
Entre 1096 y 1272, se llevaron a cabo nueve cruzadas, con distintos resultados y duración).


Pasaron por Toledo cuando comenzaba el invierno... entre calles desiertas, la oscuridad de la noche y el intenso frío... sólo sus antorchas iluminaban esa estampa tétrica...
 
Todavía llevaban en sus ropas la cruz templaria... por lo que era fácil adivinar a qué orden pertenecían...
 
(Los caballeros templarios tenían como distintivo un manto blanco con una cruz ancorada roja sobre él. La cruz estaba colocada en su manto sobre el hombro izquierdo, encima del corazón).
 
 
Lejos de renegar de su cualidad cristiana... se arriesgaban al rechazo y persecución que ya había decretado el Papa Clemente V, fruto de una conspiración por el poder e influencias del Orden del Temple, considerados los banqueros de Europa...
 
Llamaron casa tras casa pidiendo cobijo... dos golpes en la puerta seguidos... y otro después...
Pero solo se encontraban con un rechazo absoluto... cerrando las ventanas o apagando las luces...
 
Volvieron a intentarlo en la parte alta de Toledo... pero incluso en los conventos obtuvieron la misma respuesta, tras abrir la "mirilla" de la puerta de acceso... les decían que eran "sácrílegos" y contrarios a la fe cristiana.
 
(Se les acusó de sacrilegio a la cruz, herejía, sodomía y adoración a ídolos paganos: de escupir sobre la cruz, renegar de Cristo a través de la práctica de ritos heréticos, de adorar a Baphomet y de tener contacto homosexual, entre otras cosas).
 
 
Helados, hambrientos y terriblemente cansados... se refugiaron junto a un viejo y derruido puente...
 
A la mañana siguiente una copiosa nevada, (fruto de las temperaturas gélidas de la noche), dejó los cuerpos inertes de los cuatro Templarios. 
 
Sus cuerpos semi cubiertos con nieve, dejaron a estos hombres por fin... sin el sufrimiento continuo pero también sin justicia.
 
 
Y cuenta la leyenda... que sus almas "errantes" se quedaron en Toledo... vagando todas las noches por sus estrechas calles...
 
Y dicen que a veces llaman a las puertas... primero dos golpes seguidos y luego otro después...
 
 
Y quienes los oyen... son fruto de desgracias...
 
¡Hermano... ten cuidado si llaman a tu puerta de noche con tu aldaba...!
 
¡Hermano... teme las sombras, el viento que ruje fuera... y las leyendas... por si son ciertas...!
 

Fotografías

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